miércoles, 20 de mayo de 2009

[Silent Myth - Fragmento]

Ella se encontraba entre las piedras, escondiéndose físicamente para huir así de las penas. Se abrigaba bajo la sombra de los árboles y esperaba que el tiempo pasara y se llevara las lágrimas que bañaron su rostro, que se perdieron en el estero que enjugaba sus piernas y sus dedos. Y que la brisa renovara su aliento para traerle nuevas sonrisas y nuevos anhelos.
Ella no quería ser vista, pero aunque quisiera pasar desapercibida, era fácil escudriñar entre sus desconsuelos. Así fue como la encontré... cubierta por sus propias heridas, con el cuerpo desnutrido, el rostro ennegrecido, las pupilas dilatadas y la boca articulando palabras que sólo podrían ser traducidas por un loco.
Recorría sus pensamientos a velocidad de vértigo, recordaba cada una de sus palabras, se mecía en el recobeco más oculto de su mente, mientras divagaba dulcemente cantando melodías de cuna para volverse a quedar dormida.
Así fue como la encontré... totalmente desnuda, enferma y a punto de ceder a la muerte, pero con unas ganas de vivir inmensas, con una alegría inherente, con el sufrimiento guardado en una bolsa y su mente nadando en un río de esperanzas abrigado en la locura.
No tuve más que acercarme un par de pasos para que su cuerpo se remeciera ante la cercanía de un ser, ante el posible peligro o la inminente salvación. Su instinto no dio tregua pero su cuerpo no podía moverse por el cansancio, el hambre y sobretodo el dolor.
Una vez a su lado, pude ver la profundidad de su mirada. Llámenla loca, llámenla como quieran, sin embargo en mi vida he visto ojos que reflejen tal sabiduría. Y ahí estaba yo, frente a un oceano inmenso, con temor a lastimarlo y aún más a perderlo, porque sin saberlo ya había caído ante el poder de sus redes y me había atado al perdido universo de su alma.



Hambriel Mansiz (personaje) by Constanza Arriagada is licensed under a Creative Commons Atribución-No Comercial-Sin Obras Derivadas 2.0 Chile License.
Isabella Mansiz (personaje) by Constanza Arriagada is licensed under a Creative Commons Atribución-No Comercial-Sin Obras Derivadas 2.0 Chile License.
Silent Myth ~ by Constanza Arriagada is licensed under a Creative Commons Atribución-No Comercial-Sin Obras Derivadas 2.0 Chile License.

domingo, 17 de mayo de 2009

[Buena suerte? Mala suerte?]


Una historia china habla de un anciano labrador que tenía un viejo caballo para cultivar sus campos. Un día, el caballo escapó a las montañas. Cuando los vecinos del anciano labrador se acercaban para condolerse con él, y lamentar su desgracia, el labrador les replicó: «¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién sabe? Una semana después, el caballo volvió de las montañas trayendo consigo una manada de caballos. Entonces los vecinos felicitaron al labrador por su buena suerte. Este les respondió: «¿Buena suerte? ¿Mala suerte? ¿Quién sabe?». Cuando el hijo del labrador intentó domar uno de aquellos caballos salvajes, cayó y se rompió una pierna. Todo el mundo consideró esto como una desgracia. No así el labrador, quien se limitó a decir: ¿Mala suerte? ¿Buena suerte? ¿Quién sabe?». Una semana más tarde, el ejército entró en el poblado y fueron reclutados todos los jóvenes que se encontraban en buenas condiciones. Cuando vieron al hijo del labrador con la pierna rota le dejaron tranquilo. ¿Había sido buena suerte? ¿Mala suerte? ¿Quién sabe?

Todo lo que a primera vista parece un contratiempo. puede ser un disfraz del bien. Y lo que parece bueno a primera vista puede ser realmente dañoso. Así, pues, será postura sabia que dejemos a Dios decidir lo que es buena suerte y mala y le agradezcamos que todas las cosas se conviertan en bien para los que le aman.

Tomado del libro Sadhana, un camino de oración, del místico y sacerdote católico Anthony de Mello

sábado, 16 de mayo de 2009

[Cita]

Temer al amor es temer a la vida, y los que temen a la vida ya están medio muertos.